Grasa para la piel “La Santa”. Sin aceite esencial

Sólo lleva tres ingredientes:

• Tuétano y grasa de huesos de pasto (de confianza 100%)
• Aceite de moringa prensado en frío, 100% puro y ecológico

Mi obsesión por encontrar el mejor alimento para la piel me llevó a buscar y buscar y buscar hasta que descubrí que la grasa y el tuétano son grasas humectantes fantásticas para hidratar y alimentar a nuestra piel.

Los ácidos grasos del tuétano y de la grasa de la ternera de pasto son similares en estructura molecular y composición a los que se encuentran en las capas de nuestra piel, y, como resultado son increíblemente hidratantes. Rico en vitaminas A, D, E y K, el tuétano y la grasa de pasto son naturalmente compatibles con nuestra piel.

El aceite de moringa contiene numerosos antioxidantes y es resistente a la degradación oxidativa, lo que significa que el aceite no se vuelve rancio y tiene una gran vida útil. Tiene una cantidad increíblemente alta de fitonutrientes y una combinación única de ácidos grasos.

Para añadirle tu aceite esencial favorito sólo tienes que tener la grasa para la piel a temperatura ambiente, añadirle el aceite esencial que quieras y que te vaya mejor a ti y remover.

Conservación de la Grasa

Para conservar la grasa para la piel mi consejo es que guardes el bote en un lugar fresco y seco, ya que no deja de ser un “alimento” perecedero, sin aditivos de ningún tipo. Otra opción es guardarla en la nevera y en un tarrito pequeñito ponerte una pequeña cantidad para dejarla fuera de la nevera, y así la tienes lista para usarla.

Cuando aplicar

Todos los días, por la mañana y por la noche, o las veces que lo precises
Por la cara, por el cuerpo, por donde quieras. Es grasa para la piel de todo el cuerpo, no solo la cara.
Yo misma cuando me la aplico recién duchada me la reparto por todo el cuerpo y la que me queda en
la mano me la reparto en la punta de los cabellos.